Diario de una vida

Diario de una vida
Lo que he aprendido hasta el día de hoy...

viernes, 29 de octubre de 2010

De nuevo en mi camino

¿Qué puedo decir?
Tal vez me confundí a propósito.
Es claro que todo está en la mente, 
y si quiero a alguien, 
es porque he decidido quererle.
Pero en este caso no es así,
no puedo hacerlo,
no puedo obligarme a querer
a alguien a quien no quiero.
Por ahora, soy incapaz de sentir algo por alguien,
que no pase de una fugaz atracción...
No puede haber más,
al menos, no por ahora.
Quisiera, pero no.
Sólo podemos ser amigos,
no más, no hay más,
no puedo ofrecer más que eso.
Tal vez ni siquiera en ningún otro momento.
Si, lo he escogido como mi amigo,
me llevo mejor con él
que con la mayoría de los demás,
me gusta ser la niña tierna y buena,
e inteligente, y quizás un poco consentida
cuando estamos juntos,
pero en esta amistad no hay nada más.
¿Qué podría haber?
Soy incapaz de sentir algo más,
lo lamento, pero no puedo.
Lamento si en algún momento me confundí,
dudé, o dejé entrever la posibilidad
de que esta amistad va más allá...
Porque lo creía:
estaba confundida,
pensando en que era esto
lo que en verdad sentía.
Pero ahora ya no lo estoy.
He regresado al camino correcto, 
al que elegí hace tiempo,
y nadie podrá desviarme de él.
Esta amistad continuará,
como si nada hubiera pasado,...
este sentimiento de confusión se irá,
como si nunca hubiera estado,...
todo volverá a la normalidad,
incluso si eso no parece ser suficiente....
Yo continuaré,
con o sin su amistad,
para recorrer mi camino....

No hay comentarios:

Publicar un comentario